martes, 27 de octubre de 2015
villa vieja
Reseña histórica:
PRIMERA CAPITAL DEL DEPARTAMENTO DEL HUILA Y UNO DE LOS
MUNICIPIOS MAS ANTIGUOS DEL CENTRO DEL PAIS
El Valle de Yacará, hoy Villavieja, estuvo poblado por
caseríos dispersos de indígenas Doches y Totoyoes, los cuales vivieron en la
ribera del río Cabrera (Totoró), los primeros, y en la margen derecha del río
Magdalena (Yuma) LOS Totoyoes. Como testimonio de esta época, Correal Urrego
(1977) encontró una gran cantidad de
materiales líticos, los cuales pertenecen a asentamientos temporales,
establecidos en grupos muy densos de cazadores, pescadores y recolectores.
La mayor parte de estos elementos corresponde a desechos de
talla o lascas atípicas o irregulares; en esta serie están representados
raspadores de tipo lateral, terminal y discoidal, asociados a actividades de
caza. A pesar de que es incuestionable la actividad humana prehistórica en la
región de Villavieja y la Tatacoa, su naturaleza está vagamente estudiada.
Estos indígenas mantuvieron buenas relaciones comerciales con los pueblos del
norte y del sur; los puntos de encuentro pudieron haber sido los sitios
conocidos como Piedra Pintada, en la margen izquierda del río Magdalena
(municipio de Aipe) y La Venta (municipio de Villavieja); algunas cerámicas
encontradas por los campesinos dan cuanta de este hecho permitiéndonos entender
la red de caminos que hubo en el territorio huilense por donde transitaron
numerosas tribus, y culturas dese tiempos inmemoriales.
“El camino del Páramo de las Papas o del Sur, tiene antiquísimo origen que le dieron los
intercambios indígenas en tiempos precolombinos. Bien se sabe que sobre él, se
realizó el comercio de distintas naciones, como la sal de los Chibchas y las
mantas y tejidos de los Incas del Perú y otras civilizaciones situadas más
abajo de la línea ecuatorial”. Estos pueblos cayeron en manos de conquistadores
ambiciosos, codiciosos, que atendían a un patrón cultural, dirigidos por
Gonzalo Jiménez de Quesada, quien llegó desde el norte y bautizó este lugar
como “Valle de las tristezas” (1538), y Sebastián de Belalcázar, quien venía de
sur a norte (1539); los dos en busca del “Dorado”. Joaquín García Borrero, retomando
al padre Aguado, en su obra Recopilación Historial, afirma: “Teniendo noticias
de las muchas riquezas que en Neiva había, fue allá con parte de su gente…Había
en este valle de Neiva de la una parte y otra del río algunas poblaciones.
Los naturales, teniendo noticias de la llegada de los
españoles, dejaron sus pueblos y se pasaron a la otra parte del río grande,
pero luego, algunos pasaron a visitar al general, y trajeron de presente
cincuenta libras de oro muy fino y subido de quilates. La noticia del pilar de
oro no era cierta; se trataba de un madero recubierto con oro; los españoles
enfermaron debido al clima ardiente, razón por la cual le dan el nombre ya mencionado de “Valle de las
Tristezas” “El valle de Neiva fue el nombre que diera Belalcázar a lo que hoy
es propiamente el departamento del Huila”.
A partir de entonces, se entabla una lucha de principios, de
cosmovisiones diferentes, los indígenas
con el vigor y energía ecológica contra la fuerza de los españoles portadores
de una cultura del Medioevo decadente. Según Bernardo Tovar Zambrano, quien
toma datos de Fray Jerónimo, el exterminio de los indígenas fue inminente: 1538
20.000 indígenas en la provincia de Timaná, 1582 700 indígenas en la misma
provincia. Lo cual implica que en 44 años han dejado de existir 19.300
indígenas en la provincia de Timaná. “Sebastián de Belalcázar llegó al valle de
Neiva en 1538, un año después que lo hiciera Jiménez de Quesada.
Al parecer, la entrada de Belalcázar fue bastante violenta,
pues así lo señalaban fundados indicios que sobre sus actividades de ranchería,
apropiación de oro, captura de mujeres indígenas, quema de pueblos y otros
hechos similares, según una probanza hecha en Santa Fe en 1539 ante el alguacil
mayor Hernán Pérez de Quesada.
Para la expedición de Belalcázar, según lo manifiesta Juan
de Castellanos, “el valle de Neiva resultó ser una tierra exactamente opuesta a
la experimentada por los hombres de Jiménez de Quesada”. El conquistador
Sebastián de Belalcázar, recorrió el valle del río Guacacayo de sur a norte.
Comprendió el español la importancia de la región como punto clave en la
comunicación con Quito y Popayán y ordenó la fundación de las ciudades de San Calixto
de Timaná y la Limpia Concepción del valle de Neiva…La guerra fue el fenómeno
inaugural de la presencia española en el valle del Alto Magdalena. Mediante la
violencia, el terror y la muerte, el conquistador (Sebastián de Belalcázar) se
abrió campo, ocupó el territorio y subyugó a los indios.
El conquistador se apropió de la tierra indígena, fundó
ciudades que en un comienzo tenían las características de fuerte militares,
formó estancias que pronto habrían de convertirse en haciendas ganaderas y se aplicó
a la consecución de oro. La constitución temprana de las haciendas ganaderas.
En esta lucha desigual se impone la segunda.
La preñez de las indígenas, fruto de la usurpación y
violación en el primer momento, da origen a una raza mestiza que poblará más
adelante estas tierras, pero aún así los indígenas no se doblegaron y con sus
tambores llamaron a la guerra; vencer o morir fue su lema.
Los europeos no se rinden y si la fuerza de las armas no
logra someter el coraje de un pueblo fiel a sus principios, lo van a intentar
ahora ideológicamente con la fuerza de la religión y para ello traen a los
Jesuitas quienes llegan en 1612; ellos crean la hacienda Aposentos, que poco
después se convierte en emporio de riqueza ganadera y adoctrinamiento católico
y si bien los indígenas de la región no son confiables por su aguerrido pensar,
deciden traer los indígenas del Caquetá, más sumisos y fáciles de manejar para
las labores agrícolas y ganaderas; esta mano de obra fue complementada con
negros.
PROCESO DE FUNDACION DEL HOY MUNICIPIO DE VILLAVIEJA
Esta población tiene origen en las tierras pobladas por los
indígenas de origen Tama, ubicados en la margen derecha del río Grande hasta el
río Cabrera. Eran pobres y parece que pagan tributo algunas veces a los paeces y
otras a los Andaquíes.
Primera fundación: La fundación de este poblado esta
íntimamente relacionada con la fundación de la ciudad de Neiva. Sebastián de
Belalcázar antes de regresar a España (con Gonzalo Jiménez de Quesada y Nicolás
de Federmann) decide enviar a su lugarteniente, el capitán Juan de Cabrera, a
fundar una población; esta fundación se hizo en 1539 en el sitio Las Tapias
(hoy Otás, vereda del municipio de Campoalegre) bajo la advocación de Nuestra
Señora de la Concepción, la ciudad de Neiva. La población duró hasta 1510.
Segunda fundación: Para el año de 1510, la población fundada
por Juan de Cabrera fue atacada ferozmente por los nativos. Mandaba el cuerpo
de guardia de los españoles el capitán Juan de Alonso; los españoles se vieron
obligados a salir en forzosa retirada hacia el Norte, hasta un lugar donde se
levantan peñones al lado y lado del camino; este lugar fue tomado como
fortaleza por los conquistadores que lograron contener el avance de los
indígenas; al lugar se le conoce como Fortalecillas. Con los restos de su tropa
y con el mismo empeño se dio fundación a la población de Neiva, siguiendo la
orden de Belalcázar, en el lugar ocupado actualmente por Villavieja.
Allí, la colonia floreció hasta el año 1569 en que fue
destruida por los pijaos, y sus habitantes se vieron obligados a trasladarse a
Timaná.21 Esta versión es ratificada por el padre Jenaro Díaz Jordán, quien da
como fecha precisa de la fundación el 18 de agosto de 1550 con el nombre de
“San Juan Nepomuceno de Neiva. La población de San Juan Nepomuceno de Neiva fue
asaltada por Álvaro de Oyón en un recorrido devastador de Sur a Norte viniendo
desde Perú, y pasando por Popayán, La Plata y Timaná, donde se le unió Gonzalo
de Zúñiga con treinta hombres; formando un ejército de cien soldados marchó
sobre San Juan de Neiva; tomó sorpresivamente a la población, mató a los
regidores que estaban reunidos en Cabildo y robó cuanto estuvo a su alcance;
para apaciguar la situación y tratar de que los moradores regresen a sus casas
y reforme en lo necesario según convenga a su majestad fue enviado el capitán
Martín Tafur. A estos funestos acontecimientos le siguieron la insurrección de
los naturales. Retomando a Jenaro Díaz Jordán, quien cita a Enrique Ortega
Ricaurte en su obra “Recuerdos de la Real Audiencia” tomo 1, el acuerdo 13 de
abril de 1554 dice que por causa del alzamiento de Álvaro de Oyón “Los
naturales de la villa de San Juan de Neiva se alzaron y rebelaron del servicio
de su Majestad y han muerto cuatro
españoles. Por el riesgo que corren, han enviado a pedir socorro a esta
Real Audiencia, lo cual si con brevedad no se les diese podría ser causa de que
la dicha Villa de Neiva se despoblase, de que Dios y Su Majestad serian
deservidos”. Los indígenas de la región continuaron buscando liberarse de los
españoles posiblemente apoyados por los guerreros pijaos, raza valerosa y feroz
que atrasó por más de 70 años la colonización de lo que hoy es el departamento
del Huila, según Jenaro Díaz, quien cita a Rodríguez Freile y el capitán Diego
Bocanegra. Dice el primero en su obra El Carnero: “Los paeces eran naturales de
aquella cordillera, los Pijaos habían llegado desde el Darién al asentamiento
Paez con quienes trabaron amistad y parentesco, y se apoderaron de aquella
cordillera (Central), de esta banda del río Grande por encima del valle de
Neiva corre otra cordillera (Oriental)
en ella residen los Duhos, y Bahaduos que son la carne de los Pijaos… pues esta
gente por más de cuarenta y cinco años infestaban, robaban, asaltaban estos dos
caminos, matando a los pasajeros, hombres, mujeres, niños, sacerdotes con todos
los criados y gente que los acompañaba”.
El capitán Bocanegra,
a solicitud del Gobernador de Popayán, dice: “La tierra donde viven estos
indios Pijaos es muy áspera y fragosa…Los caminos reales los tienen todos
custodiados y no se puede pasar sin escolta y guarnición de arcabuceros. Con
esto tienen tan atemorizados y afligidos los pueblos de españoles y naturales
que han quedado, que no se hallan seguros, ni lo están, así se hayan
fortificado y cercado de tapias y palenques para que no den sobre ellos de
noche y los acaben a todos.
El 14 de noviembre de 1569 fue completamente destruida la
población de San Juan de Nepomuceno de Neiva por los indios Totoyoes, aliados
con los doches y pijaos, en venganza del ultraje cometido por Juan de Horta
–teniente del capitán Juan de Alonso– en Tocayá, princesa aborigen, hija del
cacique Totoyó, dueño y señor de la comarca.
Francisco de Paula Plazas menciona que el Teniente Juan de
Horta, al encontrar sola a la princesa, la tomó como su esposa y formó hogar
con ella, y debido a su gran fortaleza física y su capacidad para nadar en los
ríos, se convirtió en el jefe de los indígenas. Esta es una manera muy
romántica de justificar el mestizaje en la región. El Presidente don Juan de
Borja dio expresas órdenes de “dominar a sangre y fuego a los indios” de la
destruida villa, como en efecto ocurrió.
Origen del nombre de Villavieja: El nombre de Villavieja se
originó a partir de 1613, debido a que don Diego de Ospina, fundador de la
provincia de Neiva, para referirse a la fundación hecha por Juan de Alonso “la
mentara como Villa vieja nombre en gracia a que los pobladores de los que
distinguiera y honrara.” Es bueno hacer hincapié en el origen del actual
poblado de Villavieja, debido a que siendo uno de los pueblos más antiguos, aún
no logra despegar en su proceso desarrollo. “En 1612 don Diego de Ospina y
Medinilla, gobernador y capitán general, alguacil mayor de la Real Audiencia
del Nuevo Reino de Granada llegó a la Villa de San Juan de Neiva y la encontró
casi deshabitada. Únicamente residían algunos indios y mestizos, y tan solo, a
unos cuantos kilómetros de la villa, habitaban la riberas del río Tocayó (hoy
Cabrera) la tribu de los indios doches, y a unos pocos las del Totoyó (hoy río
Villavieja), los Totoyoes” Es muy probable que Francisco Plazas haya cometido
un error de apreciación al llamar Totoyó al rió Villavieja, porque aún hoy el
principal afluente de este río lleva por nombre Guarocó. Como se puede
observar, hasta este momento histórico Villavieja era un territorio habitado de
manera dispersa por algunos colonos; el pueblo como trazado dentro de la
concepción española no existía.
Creación de la provincia de Neiva: El fundador de la provincia
de Neiva, venía procedente de Remedios (actual Antioquia), donde se había
dedicado a encomendero de indios, poseyendo minas y cuadrillas de esclavos
negros; así que trasladó buena parte de sus inversiones hasta Neiva, llevando
entre ellas los esclavos, quienes eran muy hábiles en las labores de la
minería. La gobernación de Neiva fue creada en 1610 en la presidencia de Juan
de Borja. Otorgada mediante capitulaciones con la Real Audiencia, comprendía
las provincias de Saldaña, Neiva y Timaná. Se convirtió en un verdadero feudo
que recibió el capitán Diego de Ospina y Medinilla, fundador de Neiva, quien la
ejerció hasta el día de su muerte, el 17 de marzo de 1630; esta fue heredada
por su hijo, Don Francisco Martínez de Ospina, quien desempeñó el cargo hasta
1650, dejado a su vez en herencia a su hijo Diego de Ospina Maldonado; en 1665
le sucedió su hermano don Jacinto de Ospina y Maldonado, hasta 1667 que se
nombró a Francisco Álvarez Velasco, primo hermano del anterior y biznieto del
fundador Diego de Ospina. Estos datos sobre la Gobernación de Neiva colonial
permiten ver cómo hubo un proceso de heredad en el manejo de la Gobernación,
quedando clara la incidencia del concepto feudal en el desarrollo político de
la región.
Evangelización: En el transcurso de conquista y colonización
fue muy importante el papel que desempeñó la Iglesia Católica. Sin embargo,
para esta región no hacen mucha referencia a él los cronistas e historiadores.
Hay un dato importante que permite vislumbrar el papel ideológico de la Iglesia
en el desarrollo cultural colonial: “Su majestad don Felipe II, por real cédula
expedida en Sevilla en el año de 1557, donó a la fábrica de la iglesia de San
Juan de Neiva quinientos ducados para su construcción. Como era costumbre, por
acuerdo del 29 de septiembre de 1559 el cabildo de la nombrada Villa de san
Juan de Neiva otorgó poder a Pedro Suárez, procurador de causas de la Real
Audiencia del Nuevo Reino de Granada y a Lope de Rioja, relator de dicha
Audiencia, para que percibiera la donación”. Y en síntesis, continuaron los
poderes que da el concejo de justicia y regimiento a Pedro Xuárez, y todo el
proceso hasta recibir la donación. Ver anexo Nº 4. El mayordomo de fábrica de
la iglesia de San Juan de Neiva, a su vez, otorgó los espectivos poderes, hasta
recibir los quinientos ducados e invertirlos en la construcción de la iglesia;
se puede deducir que esta primera iglesia hace referencia a la capilla Santa
Bárbara, más tarde reedificada por José María Herrera Bahamón como se explicará
más adelante.
Hacienda Los Aposentos: Francisco Plazas, retomando a don
Gabino Charry en su obra Frutos de mi tierra, afirma: El 4 de mayo de 1631,
Francisco Martínez de Ospina, gobernador de la Villa de Timaná Neiva y Saldaña,
hijo de don Diego de Ospina y Medinilla, el fundador de Nuestra Señora de la
Limpia Concepción del Valle de Neiva”, hizo gracia y donación al Colegio de la
Compañía de Jesús de tres caballerías de tierra de las antiguas, de a seis mil
pasos en contorno, desde donde entra el río Villavieja en el río grande de la
Magdalena, corriendo el dicho río arriba en todo lo que alcanzaran el límite de
las caballerías”.
Los padres Jesuitas habían llegado al valle de Neiva en
1606; se dedicaron a la misión apostólica entre los indios y mestizos dedicados
a la agricultura y la pesca. Estos se reunían con los indios Doches en un punto
de la quebrada La Venta, situada en el trayecto del camino viejo que conduce de
Viillavieja a Cabrera, camino hacia Bogotá, para realizar sus mercados e
intercambios. Los miembros de la Compañía de Jesús, además de su misión
apostólica, dedicaron mucho tiempo y esfuerzo en la consolidación de la
hacienda los Aposentos adquiriendo tierras por donación y/ o por compra y
ganados, además de los bienes y servidumbre que había en las adquisiciones; en
esta tarea se destacó el hermano Manuel Martín, Procurador de la Compañía de
Jesús, quien además hizo construir el edificio cuyas ruinas aún hoy se aprecian
en el terreno de lo que fue la hacienda el Porvenir (hoy parcelación el
Porvenir).
Entre las compras que hizo se cuenta la hecha a Leonardo de
Mendoza descendiente legitimo del capitán Francisco de Mendoza, en 1646, de la
estancia que por heredad le correspondía, en el sitio los Ahorcados que lindan
por una parte con el río Cabrea y por otra con tierras de la Compañía de Jesús
y el río grande de la Magdalena, excepto una estancia de tierra que tiene el
Paso Real, donde está la barqueta con el mismo paso. Esta adquisición fue
ampliada con la compra a Doña Francisca de Mendoza y María Mendoza, hermanas de
Leonardo Mendoza, en 1648, de las tierras heredadas en la misma estancia de los
Ahorcados; estas tierras se extendían desde la orilla del río Cabrera hasta la
quebrada los Ahorcados, trece estancias de las ordinarias las primeras y las
segundas comprendían cuatro estancias: los terrenos desde la orilla del río
grande de la Magdalena hacia la sierra más alta de esta parte, más otras cinco
que principiaban desde el sitio de los Ahorcados río arriba hasta lindar con
las tierras de la Compañía de Jesús, es decir, con lo que hoy es la parcelación
el Porvenir. Estas tierras pertenecieron al capitán Francisco de Mendoza, quien
las recibió por donación de don Diego de Ospina y Medinilla, en virtud de
importantes servicios prestados a la Corona en la conquista de los indios
Duhos, otras en la fundación de Neiva y por último por castigar y someter a los
rebeldes Pijaos en tiempos de la presidencia de Juan de Borja. En 1659 el padre
Gaspar de Cujía compra a José Garrido de Ávila y su esposa María Fajardo
veintiuna estancias en terrenos de Guarocó, río Villavieja, la serranía Hato de
Bogotá y Señoría. La prosperidad económica de la hacienda Los Aposentos era
reconocida, ya que a este lugar concurrían hacendados de Neiva, Timaná, Tocaima
y Saldaña a negociar con la Compañía.
En 1760, eran poseedores de diez mil reses vacunas, fuera de
quinientas cabezas entre caballosy bestias y flojamente un millar de corridas
yeguas y animales menores, todo repartido en los hatos que componían y se
administraban desde la hacienda de Villavieja. Las relaciones de producción de
estos años de la hacienda de Los Aposentos se realizaron muy cordiales con un
trato afable y hasta familiarmente dentro del respeto que los amos exigían a
sus inferiores y esclavos, reconociendo las habilidades laborales de cada uno
para su desempeño.
Entre servidumbre y esclavos había un sano espíritu de
conformismo fatalista; y el aire sano de los campos y el austero hábito del
quehacer diario, plagado de virtudes y de hechos patriarcales en donde los
frailes exaltaban los primeros, levantaban el ánimo y aderezaban el carácter de
la muchedumbre para un servicio generoso como para una galantería natural. De
esta apreciación, que es un poco romántica y con un fondo de perfección
cristiana, pasamos a otra apreciación de la realidad. La explotación de los
esclavos por parte de los Jesuitas presentó varias características que la
identifican; algunas de ellas en franca contravía con la Corona.
Según la misma fuente bibliográfica, se les inculcó la
religión católica y por ende la familia monogámica de línea patriarcal, casi
todos provenientes de negros bozales, es decir, traídos directamente de África.
Se les permitió conservar las bases culturales y organizativas al interior de
su grupo admitiéndoles la unión familiar y comunitaria alrededor de una
fracción de tierras llamadas “Conucos”, consistentes en parcelas pequeñas, pero
suficientes para sembrar maíz, caña de azúcar y demás productos necesarios para
la alimentación, además de monte para sacar leña y madera para construir sus
rústicos ranchos.
En los conucos cultivaban y criaban especies menores para el
autoabastecimiento alimentario del grupo y para con el excedente cubrir la
demanda de los hermanos evangelizadores y administradores o legos. La
dedicación de la hacienda era la ganadería extensiva por lo cual no se requería
la mano de obra femenina, lo que permitía a las mujeres dedicarse a las labores
agrícolas y cría de especies menores para su alimentación y el cuidado de la
hacienda. Los esclavos podían trabajar a un ritmo más relajado sin que les
vigilase constantemente su forma de vivir. Lo anterior permitió incentivar la
productividad de la Hacienda, propiciar el arraigo a la tierra, el acato y
respeto a las normas impuestas por los Jesuitas y fomentar la convivencia
armónica y pacífica al interior de la comunidad.
En 1767 los padres de la Compañía de Jesús fueron expulsados
de los dominios de España por su Majestad el Rey Carlos III de Borbón y al
Virrey don Pedro Mecía de la Cerda le tocó esta expulsión en el Nuevo Reino de
Granada. Como consecuencia inmediata, el 3 de agosto de 1767 el Virrey
comisionó a don Miguel Gálvez y Ceballos, Gobernador de Neiva, para que se
traslade a la hacienda Los Aposentos con escribano y testigos para entregar la
carta de su provincial, al padre administrador Saturnino Fornet, solicitar las
llaves, inventario y orden de abandonar la hacienda y ser conducido a la Villa
de Honda, para dar cumplimiento a la orden del rey.
El 4 de septiembre, por orden del Virrey se entregaron todos
los hatos, enseres y semovientes al esclavo Juan Fortunato, muy conocedor como
que había sido adiestrado por el Provincial Tías en la administración. Hasta
este momento no se había logrado hacer el inventario de los semovientes, debido
a la temporada de lluvias, propias de este periodo de tiempo. En noviembre, se
trasladó el Gobernador a Villavieja para presenciar los rodeos. Estando en este
lugar recibió orden superior para entregar todos esos haberes a Don Fernando de
Guzman y Luna, quien había sido nombrado administrador, hecho que se verificó
ante los testigos: Miguel de la Borda y Juan Calderón el 23 de diciembre del
mismo año, hasta el 4 de marzo de 1769.
En el mes de agosto de 1767, todos los bienes de la compañía
de Jesús en el Nuevo Reino de Granada fueron ocupados por las autoridades
civiles, y con ese motivo de 1769 a 1770, sirvió el cargo de administrador de
la hacienda don José Antonio del Lago, quien de allí pasó a Gobernador y
Justicia Mayor de la ciudad y Provincia de Neiva, y Corregidor del partido de
los Paeces. Es muy importante el énfasis
que Francisco Plazas hace sobre este asunto tomando los datos del Archivo
Nacional de Temporalidades tomo 7 folio 889, Virrey “…toda la hacienda se compone
de 219 y media estancias, treinta y cuatro y media cabuyas de tierra, 15.176
reces vacunas 2716 yeguas 843 cabras 98 ovejas, 98 esclavos…su valor total es
de 108.620 pesos 5 reales, 7 maravedíes y dos tercios de otro. Dado a los 14
días del mes de junio de 1762. Firma Antonio del Lago y Roque Arias de Prada,
escribano público. Hecha la demarcación el señor Francisco Antonio Moreno,
Protector General del Nuevo Reino y fiscal de la Junta de Temporalidades,
ordena pregonar la venta de las haciendas; este acto se ofició en la voz de
Juan mulato durante treinta días en la esquina en la plaza pública a la salida
de la misa mayor. Pasado este tiempo, aún no se vendían las haciendas por lo
que las continuó administrando don Antonio del Lago.
En 1776 don Joaquín Arce y Piedrahita, vecino de Neiva
informó a la Real Junta de Temporalidades que remataría las haciendas pagando
una parte de contado y otros meses después, asegurando un rédito (interés). El
5 de agosto de 1775 había entrado a ejercer como Gobernador de la provincia de
Neiva el señor Policarpo Fernández, quien con Faustino Flores, abogado de la
Real Audiencia y el señor del Lago hicieron entrega de la hacienda al señor
Arce.
FUNDACIÓN DEL CENTRO ADMINISTRATIVO DE LO QUE HOY ES EL
MUNICIPIO DE VILLAVIEJA
En el transcurso de la Colonia, el poblado de Villavieja fue
sujeto de hechos históricos que se perdieron en el tiempo, sin dejar huella
fehaciente de su acontecer en desarrollo del progreso, pero que para entender
lo que hoy es el devenir cultural se debe tener presentes. Seguimos a Francisco
de Paula Plazas: cuatro años antes de que fueran expulsados los Jesuitas, los
villaviejunos se habían dirigido al señor Arzobispo Metropolitano de Santafé
para que su capilla y vecindario fueran constituido en parroquia.
Este documento quedó sin respuesta debido a la muerte del
Ilustrísimo Señor Araus en 1764. Nueve años más tarde el señor Arzobispo fray
Agustín Camacho encomendó al Dr. Francisco de Vargas la solicitud de las
villaviejunos, por ser este visitador de las provincias de Tocaima, Neiva, y
cura de la Villa de Purificación; sin mediar palabra, el cura intentó anexar a
su parroquia los hatos de Boquerón, Salermo y Raspacanillas que pertenecían a
la hacienda de Villavieja, y además logró que el señor Virrey aprobara los
límites de los Aposentos de Villavieja. Este hecho ocasionó la protesta de los
villaviejunos y del cura de Alpujarra.
El visitador Vargas, para solucionar el problema, encarga al
Gobernador de la provincia de Neiva, y solicita al capellán de la hacienda de
Villavieja datos sobre número de habitantes y lo que producían las primicias y
limosnas. La respuesta manifiesta que dentro de los límites dados hay 90
cabezas de familias que pueden aportar treinta pesos anuales; manifestando que
es justa la protesta que hacen los vecinos de Boquerón, Salermo, Raspacanillas
a unirse a la parroquia de Alpujarra, ya que estos moradores se agregarán a la
nueva parroquia que ha de fundar en Villavieja. El señor Gobernador envía al
señor visitador eclesiástico el informe así:
1. Es justa la oposición de los vecinos de Boquerón, Salermo
y Raspacanillas para unirse a la parroquia de Alpujarra y pedir la agregación a
la nueva que se ha de fundar en Villavieja.
2. Las familias al presente existen exceden a ciento, las
que aumentará cuando se vendan las dieciséis haciendas, y se compondrá un
vecindario que haga apetecibles el curato por su congruo, conveniencia y fácil
administración.
3. Los hatos son ricos por sus ganados; cada hato ha sido
evaluado en 7.00 pesos, lo que atraerá a las gentes para aumentar el
vecindario.
4. Para formar la población me parece ser en el hato de
Villavieja donde está la capilla, cuyo terreno de medio cuarto de estancia
podrá valer 10 Pesos, a razón de 80 en que se ha evaluado la estancia, el cómo
depende su donación de la real Junta de Temporalidades, no puedo opositar si la
cederá su majestad junio de 1772 José Antonio del Lago. Los documentos fueron enviados al Virrey
Guirior, quien ordena a la junta de Temporalidades ceder la capilla y terreno
necesarios para la nueva parroquia.
Se infiere del devenir historiográfico que para el año de
1773 aun no había un centro administrativo conforme a la usanza española en la
fundación de pueblos, sino caseríos dispersos en torno de las haciendas; razón
por la cual, la actual Villavieja nace como centro administrativo por la
intervención de los pobladores y la necesidad de una parroquia que facilitara
la oficialización de los actos religiosos y como estrategia de atraer nuevas
familias que compraran los hatos que estaban a la venta. El 7 de mayo de 1775,
la Junta de Temporalices expresó: “Que desde luego aplican y adjudican la
hacienda de Villavieja para que sirva de iglesia a la parroquia, concediendo al
mismo tiempo el cuadro de plaza y casa de habitación del señor cura, con lo
preciso para cárcel, a cuyo efecto se librará orden al Gobernador de la
Provincia de Neiva administradora de aquella hacienda para que en esta
inteligencia separe la parte de terreno que va aplicada, midiéndola con prolija
especificación para que se entregue con capilla a quien corresponda quedando
derecho a la misma hacienda para arrendar por precios equitativos los solares
necesarios a los que quieran poblarse. Firma el auto anterior Guirior, Garjano,
Arostegui, Ríos y Moreno”.
Trazado del poblado de la actual Villavieja: El gobernador
del Lago siguiendo los parámetros establecidos hace su informe donde consta lo
siguiente: “Yo don José Antonio del Lago administrador de las haciendas de
Villavieja… hago la siguiente medición: Desde la esquina de la casa de vivienda
de este hato que esta hacia la parte del Río grande de la Magdalena, siguiendo
recto al frente de dicha casa hacia la quebrada Verde, hasta donde llegaron las
sesenta y seis varas, se puso un estantillo por mojón, quedando formado el
costado que mira al oriente. Y desde dicho estantillo siguiendo en recto el
costado que mira hacia la parte del sur y esta al lado de dicha quebrada Verde,
hasta otro estantillo en que se contaron otras tantas varas, desde este,
dándole las mismas, llego delante un poco de la esquina que hace el corral de
este hato, igual con la esquina de la casa del negro Salvador, que forma las
dos bocacalles cruzadas que debe tener la plaza por esquina, y quedo delineado
el costado que mira al poniente; desde dicho paraje siguiendo la casa del sobre
dicho negro Salvador se midieron otras tantas varas que llegaron a la esquina
de la casa del primer lindero, formando el costado que mira a la parte del
norte, y demarca la plaza. Elijo y separo en cualquiera de dichos costados para
la iglesia el terreno de ciento cuarenta y ocho pies de largo (148) por treinta
de ancho (30 que son los mismos que tiene la actual capilla. Para la casa del
cura el solar contiguo a la iglesia, de ochenta pies en cuadro y para la cárcel
el de sesenta pies uno y otro competente, con lo que se termina la presente
diligencia en la Hacienda de Villavieja jurisdicción de la ciudad de Neiva, a
29 días del mes de mayo de 1775 José Antonio del Lago.
El alarife Miguel Rivera. Testigos, Juan Bahamón, Francisco
Marroquín.” A partir de este momento, Villavieja cuenta con el marco
característico de las fundaciones españolas, alrededor de las cuales se
desarrollan los hechos del diario vivir de la época, en cuanto a su derredor se
poblaba con las personas más prestantes del momento, se ofrecía los oficios
religiosos y se decidía sobre asuntos sociales de importancia del poblado.
bandera
escudo
santa maría
Reseña histórica:
Imagen de historia de Santa María
Los primitivos pobladores de la región que hoy ocupa Santa
María, fueron los PAECES y PIJAOS.
Paeces: Es bien sabido y consta en diferentes crónicas que
datan del período de la conquista, este pueblo estaba diseminado en la parte
baja de la cordillera Central por la margen izquierda del Río Magdalena. El
termino BACHE nombre del río que recorre este municipio es de origen Chibcha
familia a la que pertenecía la nación PAEZ ; por otra parte, los restos líticos
y de cerámica encontrados en excavaciones hechas en diferentes sitios del
territorio samario, concuerdan con lo conocido del pueblo Páez. Por el nombre
del río, se deduce que la tribu que habitó esta región fue la BACHE, lo que en
lengua Quechua significa Arroyo de Tierra.
Pijaos: Pueblo aguerrido y guerrero que habitó en la
cordillera desde Ibagué hasta el nevado del Huila. Son dos las situaciones que
nos permiten ubicar casi con precisión la presencia de estos aborígenes en
tierras de Santa María.
Como vemos, se refiere a la cordillera central,
concretamente a la región comprendida entre La Plata y Órganos, este último
sitio ubicado al Noreste de Santa María en territorio del Municipio de Neiva.
La presencia en la mayoría de las lomas y faldas que conforman la topografía
samaria, de pequeñas explanaciones equidistantes y concentradas, en lugares
como la Honda (Vereda San Miguel) y el Encanto entre otros.
Fundación:
El caserío de Santa María como tal, surge a partir del
proceso de expansión de la frontera agrícola, inicialmente como ya se dijo con
los cultivos ilegales para la época, de tabaco y anís y posteriormente con los
cultivos de pan coger tales como plátano, yuca y la explotación del ganado
vacuno. No se observa a lo largo de su proceso, una fundación formal, sin
embargo, se pueden citar como actos de fundación los siguientes eventos:
1.Construcción de la capilla, Abril 27 de 1.923
2.Apertura de los libros parroquiales, Octubre 16 de 1.923,
por el padre Antonio María Trujillo.
3.Bendición de la imagen de la Virgen del Carmen, entrada
triunfal, toma de posesión de la capilla y consagración de todos los habitantes
a la Santísima Virgen, en Abril de 1.929 en acto comunitario presidido por el
Sacerdote Andrés Hermida.
Santa María inicia su vida administrativa como corregimiento
en 1.940, dependiendo directamente de la Gobernación del Huila quien en cabeza
del gobernador designaba el corregidor, generalmente según lo atestigua Don
Arturo González Trujillo y la Señora Cecilia Polanía Cabrera, procedían de la
capital del Departamento o de la cabecera Municipal de Palermo; estos
funcionarios eran personas generalmente dedicados al servicio público y
militantes de partido político del gobernante de turno.
Algunos de los corregidores terminaron radicándose
definitivamente en Santa María, como fue el caso de Don Jesús María Polanía
quien se convirtió en yerno de Don Santos Coronado, y de acuerdo al ya citado
Don Arturo González, a la postre actor de primer orden en los acontecimientos
del 8 de Octubre de 1.949, cuando se inicia el enfrentamiento directo entre los
partidos conservador y liberal con las consecuencias que más adelante se
detallan.
Entre las acciones más destacadas de los corregidores
estaban las de atender las querellas entre los vecinos, los problemas de
linderos y liderar actividades de desarrollo comunitario como mejoramiento de
caminos y de las calles del naciente poblado, para lo cual contaba con la
colaboración del Comisario quién utilizaba un bolillo , como único apoyo para
cumplir con su función También en la época de la violencia el Corregidor era el
encargado de organizar la defensa del poblado y hacer los correspondientes
levantamientos de cadáveres. Según testimonio de Roberto Sáenz Perdomo, las
decisiones administrativas del corregidor se hacían mediante Decreto que era
promulgado precedido del toque de tambor (Bando) en la plaza pública.
Para la época en que se crea la Inspección de Policía de
Santa María ya se cuenta con una población de más de dos mil habitantes y la
comunidad está en proceso de consolidación de la organización comunitaria a
partir de las Juntas de Acción Comunal. Este periodo corresponde a la fase
final del periodo conocido como “de la violencia política” de los años
cincuenta. La población está en proceso de continuo crecimiento por efecto de
las migraciones de familias conservadoras, procedentes de Cundinamarca, Boyacá,
Sur del Tolima y Nor Occidente del Valle, a la par con este fenómeno de
poblamiento se da el desarrollo de la agricultura, especialmente el cultivo de
la alverja y del café.
Santa María fue erigido Municipio por medio de la Ordenanza
N° 006 del 26 de Noviembre de 1.965, cuyo principal ponente fue el Diputado
Oporapeño Manuel Salvador Molina, según acta N° 22 del 9 de Noviembre de 1.965,
de la Honorable Asamblea Departamental; en este empeño, se destacaron por su
dedicación y capacidad de gestión los siguientes personalidades Samarias: El
Presbítero Arcenio Carvajal, Roberto Sáenz, Luís Andrade y Alfonso Vega,
quienes lideraron el proceso que permitió allegar la documentación necesaria
para la elaboración del correspondiente proyecto de ordenanza.
Este nuevo período de la vida institucional de Santa María,
se caracteriza entre otras situaciones por la polarización de la comunidad
Samaria alrededor de los dos grupos conservadores de mayor representatividad,
Alvaristas y Pastranistas ; quienes en cabeza de sus representantes, jefes de
Directorio y concejales Municipales en muchas oportunidades, dadas sus
posiciones radicales, llegaron a limitar la gobernabilidad del Municipio; esto
se refleja entre otras cosas, en los tiempos de desempeño de los alcaldes, que como
se puede observar en el listado siguiente, la gran mayoría de alcaldes que se
desempeñaron antes de la elección popular, no alcanzaron a cumplir un año y
medio al frente de los destinos del Municipio.
Arriba
Geografía:
Descripción Física:Esta ubicado en territorios montañosos
pertenecientes al relieve de la vertiente oriental de la cordillera central,
dentro de los que también se encuentras algunas zonas planas o suavemente
onduladas, que por la conformación de su topología presentan los pisos térmicos,
calidos, medio, frio y páramo, regados por las aguas de los ríos bache y yaya,
además de varia quebradas y fuentes de menor caudal.
El Municipio de Santa María tiene una extensión de 313.74
Km2, está localizado al Noroccidente del Departamento del Huila, sobre las
estribaciones de la Cordillera Central en el flanco oriental, a una distancia
de 54 km. de Neiva, capital del Departamento del Huila. La figura No. 4 muestra
la localización del Municipio de Santa María Huila.
El Municipio comprende la cuenca alta del río Baché y un
sector de la cuenca alta del río Saldaña; el río Baché baña aguas abajo grandes
zonas productivas del los Municipios Huilenses de Palermo, Neiva y Aipe;
drenando sus aguas al río Magdalena.
La cabecera municipal se encuentra ubicada a 2º 59’ latitud
Norte (N) y 75º 47’ de longitud Oeste (W), ocupando un área de 45.66 Has,
equivalente al 0,15% del Municipio.
bandera
escudo
suaza
Historia
Fecha de fundación:20 de octubre de 1842
Nombre del/los fundador (es):HELENA VALDERRAMA
Reseña histórica:
Imagen de historia de MUNICIPIO DE SUAZA
Los habitantes
precolombinos de la región fueron los Andaquíes. El Municipio fue fundado en
1748 por doña Helena de Valderrama, nació con el nombre de Casas Quemadas o Las
Quemadas al sur de su actual localización. En 1842 fue erigido en distrito
municipal con el nombre de Santa Librada, denominación que conservó hasta 1934,
cuando la Asamblea Departamental lo nombró Suaza.
Suaza está situado sobre la vertiente occidental de la
cordillera Oriental o corredor transamazónico. En el año de 1997 fue catalogado
por el Departamento Nacional de Planeación en quinta categoría y en 1998 se
recategorizó a sexta.
FUNDACION RELIGIOSA.
En la visita de 1628 los indios encomendados al sitio de
Suaza declaraba “que el lugar y las tierras
son buenas y está a la vista de Timaná y cerca de la iglesia donde se
hace la doctrina y es su sitio y asiento antiguo”. Esta es la primera
referencia escrita que tenemos sobre la región.
Los vecinos del cabildo de Timaná, daban cuenta que en entre
1637 y 1662 atacaron los andaguíes catorce
veces la región de los hatos y
agregan que les quemaron las casas y una iglesia que tenían. Si la apreciación
es correcta en el sitio que hoy se conoce como las Quemadas se construyó la
primera Iglesia.
En 1721 Melchor de Losada dispone testamentariamente que de
sus bienes se funde una capellanía de misas y memorias perpetuas, siendo
capellán interino FRAY MIGUEL DE CAVIEDES. De otra parte las partidas de
bautismo más antigua de la viceparroquia del sitio de Suaza y que reposan en el
libro II del archivo parroquial de Timaná corresponde a JOSE MANUEL Y MARIA
MANUELA, hijos de Rafael del Campo Salazar y doña JUANA DE AGUIRRE, fechadas en
febrero 21 de 1738.
Alrededor de la capilla se de fue creando el pueblo, que con
el tiempo se convertiría en viceparroquia, sin sacerdote fijo ni autoridades
estables. La presión de los vecinos hace que con el tiempo las autoridades
eclesiásticas y civiles le dieran al sitio la categoría de parroquia y por ende
de Municipio.
Entre 1739 y 1823 la Viceparroquia de Suaza dependió de la
de Timaná y entre 1823 y 1842 las Viceparroquias de Suaza y Guadalupe se
integran y constituyen la Parroquia de
NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE
. Para 1842 los vecinos de Suaza ven colmadas sus
aspiraciones, al ordenarse eclesiásticamente su conformación como parroquia
independiente con párroco fijo, siendo el primero don INOCENTE DELGADO, según
constancia del libro I de bautismo.
En el Tomo II (1771-1804), volumen III, folio 166, Notaría
de Garzón, encontramos una escritura del 31 de julio de 1788 mediante la cual
RAFAEL CANO dona el pedazo de tierra que ocupa la plaza de la viceparroquia de
Suaza. En este mismo año y con escritura del 8 de agosto
CALIXTO PERDOMO
dona un pedazo de tierra para que se construya el área
poblacional. De estas donaciones debió tomar atenta nota el cabildo de Timaná y
a través de sus regidores impulsar el diseño y configuración del poblado, tal
como lo disponían las ordenanzas del bosque de Segovia. Lo primero que se traza
es la plaza mayor la cual no debe ser menor de 200 pies de ancho y 300 de
largo. De la plaza deben salir cuatro calles principales anchas, luego debe
señalarse el sitio de los edificios públicos. Siguiendo el orden de las plazas
edifíquense las viviendas dejando espacios trazados para futuros establecimientos.
El lugar que se elija para la nueva fundación debe ser alto, bien ventilado,
con buena provisión de leña, pasto, y tierras de labor.
GABINO CHARRY refiriéndose a la fundación de Suaza dice:
“que algunos historiadores aseveran fue en 1780”. Talvez se deba a estas
donaciones o a la Viceparroquia.
FUNDACION POLITICA.
Ante el jefe político del Cantón de Neiva encargado
accidentalmente de la gobernación de la provincia, sesenta vecinos de la
Viceparroquia de Suaza envían un memorial solicitando se constituyan en
distrito parroquial el territorio que comprende, y oído los informes del
concejo comunal de Guadalupe, a cuyo distrito
perteneció aquella, El concejo Municipal del cantón Neiva apoyados por
el reverendo señor Obispo de Popayán, Decretó por el Artículo I “erígiese el
distrito parroquial bajo el nombre de SANTA LIBRADA”, el territorio conocido
hasta ahora como agregación del distrito de Guadalupe y denominada
Viceparroquia de Suaza. En el Artículo II le fueron señalados límites precisos.
Este Decreto fue expedido en Neiva en 1842 y así adquirió el carácter de
Distrito Municipal.
La ley 46 de abril 29 de 1905 creó el Departamento del Huila
empezando su vida Administrativa independiente el 15 de junio, siendo su primer
Gobernador el señor
RAFAEL PUYO PERDOMO.
Ya en siglo XX, por ordenanza Número 25 de 1935 la asamblea
Departamental del Huila le cambió el nombre por el de SUAZA, retornando a su
nombre original.
El nuevo Municipio contaba con las siguientes parcialidades
o veredas: La Singa, Hato Viejo, San Calixto, Satía, Las Quemadas, Emayá,
Tapias, Picuma, Picumita, Guayabal, Mantagua, Avispero, Gallardo y San Martín.
bandera
escudo
guadalupe
Reseña histórica:
Imagen de historia de GUADALUPE
El Municipio de GUADALUPE De acuerdo con los primeros
indicios, en el año de 1682 existió un caserío en confluencia de la quebrada de
la Viciosa en el Río Suaza, y desde 1715, fue un corredor utilizado para la
conducción del caucho extraído desde las selvas del amazonas; desde entonces
Guadalupe se constituyó en un caserío en el cual los viajeros hacían estancia
para divertirse en casas de lenocinio que por aquel entonces estaban ubicadas
en lo que hoy es el parque principal, El asentamiento humano se comenzó a
radicar firmemente en el territorio en el año de 1.715; cuando Doña Francisca
de Salazar, rica hacendada, hizo donación de un lote de cinco leguas por cada
lado, comprendido por el norte y el sur entre los ríos Pescada y Suaza; arroyo
de Emayá por el occidente y los ramales de la cordillera por el oriente para
que se construyera la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe de la cual era
devota. Alrededor de la Iglesia se formó el caserío y futuro pueblo de La
Viciosa, como se le llamó al municipio inicialmente.
Casi un siglo más tarde en 1804, se estuvo gestionando la
fundación de la Viceparroquia, y la licencia fue concedida por el hermano.
Señor Velarde y aprobada por el Virrey el 7 de abril de 1.807. Más tarde por
segunda vez, la autoridad eclesiástica erigió la citada Viceparroquia por
decreto del 12 de diciembre del 1811, que dice en su parte resolutiva “Por
tanto, mandamos librar y librarnos el presente por el cual erigimos y creamos
Iglesia ayuda de Parroquia en el sitio de La Viciosa, territorio de curato de
La Jagua, Mariano Pérez Valencia.”
El primer documento con relación a este asunto es el decreto
del señor Provisor Don José María Grueso del 17 de junio de 1819, que fue
enviado al Virrey Sámano. Parece que el Virrey alcanzó a darle la aprobación,
pero la confusión que sobrevino el gobernador de su majestad dos meses después
por la inesperada y victoriosa campaña de Boyacá, nada se encontró acerca de
dicha ratificación; sólo el decreto del provisor fue hallado por el General
Santander quien lo aprobó por decreto el 24 de noviembre de 1819.
Cuatro años después, el mismo. Señor Salvador Jiménez de
Enciso ratificó la erección por el decreto 25 de pueblos y parroquias.
Para mayor ilustración, hagamos un recorrido por el
calendario histórico más sobresaliente en la vida de la municipalidad.
1715-
Doña Francisca Salazar Valdés, hija del escribano Francisco de Salazar y
Barrios y Petronila Valdés, dueña en ese entonces de la hacienda de Cachimbal,
hace donación de cinco franegadas de tierra con destino a la fundación de un
pueblo en honor a la Virgen de Guadalupe; limitado así: Por el norte con la
quebrada Pescada, por el sur el río Suaza, por el occidente con el arroyo Emayá
y por el oriente con los flancos de la Cordillera Oriental.
1783- 8 de
marzo. Desde la Parroquia de la Jagua son administrados los caserios de San
Calixto de Suaza, La Viciosa hoy Guadalupe, Boquerón hoy Altamira y Garzoncito
hoy Garzón. En esa época los pueblos más importantes que había sobre la
serranía de la Ceja, eran Timaná y la Jagua.
1807- 7
de abril. Monseñor Velarde, de acuerdo con el Virrey erigió el caserio como
Viceparroquia de la Viciosa, dependiente de la Parroquia de la Jagua.
1819- 24
de noviembre. Fue confirmado mediante decreto firmado por el General Santander,
la erección de la Parroquia de Nuestra Señora de Guadalupe del pueblo de la
Viciosa.
1823- 25
de agosto. Es ratificado por el Ilmo. Salvador Jiménez de Enciso, la erección
en Parroquia del pueblo de la Viciosa y Suaza, segregada de la Parroquia de
Timaná y la Jagua bajo advocación de la Virgen de Guadalupe, cumpliendo así la
exigencia de la donante del terreno en 1715, y eligieron como primer párroco al
doctor Francisco Sánchez; elección que se hizo mediante voto de pueblo, la
Viciosa tenía para ese entonces 1698 habitantes y Suaza 1020.
1827- 16
de noviembre. A las 5:45 de la tarde se sintió un violento terremoto que unió
los cerros de Buenavista y el Grifo formando una represa del Río Suaza y la
quebrada la Viciosa, obstrucción que duró cincuenta y cinco días, cubrió a
Lagunilla, Los Cauchos, Turupamba y el pueblo desapareció por completo.
1828- 10
de enero. En las primeras horas de la noche se rompió la represa y arrasó con
todas las cementeras, habitaciones y animales que encontró en las orillas,
llenó de lodo todas las casas y en general todo el poblado.
1828. 26
de agosto. El obispo de Popayán erige en Parroquia el caserio de Guadalupe,
atendiendo la solicitud que habían hecho los vecinos desde 1811, pidiendo que
los independizara de la Jagua. Así lo consigna el historiador Gabino Charry en
su libro “Frutos De Mi Tierra”, pero de acuerdo con la gravedad, pues Guadalupe
fue destruida en su totalidad por el terremoto de 1827, pues solo habían pasado
siete meses y el terreno no se había solidificado, por ello no podía tener
capacidad para este rango.
1836- 6
de enero. Vuelve a figurar como distrito parroquial el caserio de Guadalupe,
pero Suaza ya había logrado independizarse.
1865-
Durante este año fue creada la Escuela de Varones con treinta y ocho alumnos y
dirigida por el señor Emiliano Castillo, con un sueldo de $192,oo anuales
pagador por la aldea de Guadalupe.
1886- 21
de septiembre. El Presbítero Rojas siendo Párroco de Guadalupe compró a los
esposos Cecilito Rodríguez y María Vicenta Cuellar un lote de ochenta metros de
frente por cincuenta y dos de fondo con destino a la construcción de un nuevo
templo y casa cural.
1888- 5
de mayo. Es inaugurada la Capilla de Santa Lucía, que lleva ese nombre porque
allí se encontró una pequeña imagen enterrada de esta Virgen, esta capilla que
sirvió de oratorio mientras se construía el Templo actual.
1905- La
Ley 46 que creó el departamento del Huila, considera a Guadalupe como uno de
sus municipios y le deja los mismos límites.
1922- 29
de marzo. Mediante ordenanza de la Asamblea del Huila, es creada la Escuela
Infantil de Guadalupe, dependiente de la escuela de varones.
1933- El
conflicto con el Perú activó la construcción de la hoy carretera central que
comunica al departamento del Caquetá con el resto del territorio nacional, a
raíz de la construcción de esta carretera se crea la vereda Resinas que se
inició como un caserio para los constructores de la carretera.
1950- 7
de noviembre. Centrales Eléctricas del Huila S.A. compró la planta eléctrica de
la quebrada la Viciosa.
1955- El
Padre José Dario Ovies Garcés, párroco de Guadalupe funda el Colegio San Juan
Bosco para varones, que inició con los grados 4° y 5° de primaria y 1° de
bachillerato, como rector fue nombrado el señor Lisandro Trujillo, este
funcionó en la capilla, en el año 1959 fue cerrado este plantel.
1959- Es
creada la Agencia de la Caja Agraria y como su primer director nombró al señor
Felix María Cuenca Cadena. La cual hoy cuenta con sede propia,
1960-
Fundan en Guadalupe un nuevo colegio parroquial con el nombre de María
Auxiliadora, con los grados 1°, 2° y 3°. Como directora la señora Beatriz
Duran.
1966- Mes
de febrero. El colegio parroquial María Auxiliadora abre el grado 1° de
bachillerato con un total de 20 alumnos, mas la primaria completa de 1° a 5°.
Este funcionó en el campamento dejado por la zona de carreteras.
1972- Mes
de noviembre. Comienzan los estudios de prefactibilidad del programa
internacional Ayuda Estudiantil, el proyecto se hizo realidad en 1973 con un
capital de $7.000.000.oo que aprobó Ayuda Estudiantil de los Estados Unidos a
través de esta fundación. El programa fue bien recibido y ha marcado una pauta
en el desarrollo intelectual y material en todo el municipio.
1978- 12
de octubre. Fue sembrada la Ceiba de Guadalupe por el personero Jesús Antonio
Tovar Arce, esta fue traída por el Alcalde de la época el señor Lisandro
Trujillo Pérez. El parque se inició a construir con la colaboración del
proyecto Planes Ltda. Que aportó los planos y la comunidad el trabajo.
1979- 12
de febrero. El Colegio María Auxiliadora se trasladó al local propio que habían
construido con Ayuda Estudiantil, la colaboración del municipio y padres de
familia, sobre la Avenida Cervantes y abren el grado 5° de bachillerato. El
lote fue vendido por el señor Jorge Enrique Olave Trujillo y legalizado por el
INCORA mediante escritura pública No. 1199 de agosto 29 de 1985.
1980- 3
de julio. Mediante decreto No. 421 de la Secretaría de Educación Departamental,
fue creado el Núcleo Educativo de Guadalupe con sede en el Colegio María
Auxiliadora, su primer director fue el señor Luis Ignacio Velázquez.
1988- 13
de marzo. Mediante voto popular, es elegido el señor Carlos Ezaut Son Perdomo
como primer Alcalde en esa modalidad en representación del partido conservador,
para el periodo comprendido entre el 1° de junio de 1988 al 31 de mayo de 1990.
1994-
Guadalupe recuerda su más reciente y dolorosa tragedia, ya que el 1 de abril
del año en mención, ocurrió el represamiento de la quebrada Viciosa, debido a
deslizamientos producidos por la inestabilidad del terreno en ciertas zonas de
la parte alta de la quebrada y al crudo invierno que por esos días azotaba la
región. No obstante, Guadalupe se erige como uno de los municipios más
prósperos del departamento y conserva su nivel de vanguardia en la toma de
decisiones de carácter departamental.
1.999- 11 julio. Se realiza la Consulta Popular para el
cambio del día de mercado de los días sábado y domingo, a los días viernes y
sábado. Esta consulta obtuvo un total de 1.502 votos a favor y 973 en contra
del cambio. Aunque no se obtuvo el número de votos suficientes para que la
consulta fuese válida; el alcalde Sr. Carlos Ezaut Son Perdomo decide cambiar
por decreto los días de mercado a los viernes y sábados (Dec. 045 del
13-07-99).
Arriba
Geografía:
Descripción Física:El sistema orográfico de éste territorio
está formado por filos que se disyuntan de la cordillera Oriental y van
perdiendo altura hasta confundirse con las fértiles vegas del río Suaza y la
quebrada de la Viciosa.
Guadalupe presenta alturas desde los 940 hasta los 2.600
m.s.n.m. Las alturas que tienen mayor importancia dentro del municipio son
Santa lucía y Gabinete sobre la vía a Florencia que están a 2.300msnm, le
siguen en importancia los filos de pan de Azúcar, resina, Las Barquetas,
Potrerillos, Guapotón y Mortiñal. Merecen mención los pequeños valles donde se
encuentran ubicadas las veredas de Los Cauchos, Sartenejal, Turupamba y
Cachimbal.
Límites del municipio:El municipio limita de la siguiente
manera:
Norte:
Municipio de Garzón por la quebrada La Pescada
Oriente:
Departamento del Caquetá, divisoria de aguas Cordillera Oriental desde
nacimiento de la quebrada La Pescada hasta la Quebrada La Perica.
Occidente:
Con el Municipio de Altamira por el Río Suaza
Sur: Con
el Municipio de Suaza, partiendo del zanjón El Lindero, pasando por los cerros
de San Calixto y Pablico hasta encontrar el nacimiento de la quebrada La
Perica.
bandera
escudo
palermo
Reseña histórica:
Nombre del/los fundador (es):El 7 de Enero de 1774, el
Doctor Ordóñez expresa que el municipio de Guagua tiene fundación firmada por
el ilustrísimo Agustín Manuel y el excelentísimo Manuel Guirior, lo cual fue
oficializado mediante Acuerdo 002 del 14 de Enero de 1973. Hoy Palermo
Imagen de historia de PALERMO
(Fuentes Bolívar Sánchez, Hernando Perdomo y Henry Calderón)
Hoy Palermo, ayer Guagua, antiguo Territorio Páez. El origen del Cañón de
Guagua tuvo lugar al parecer en el año de 1632 por el Licenciado Francisco
Triviño de Sotomayor, en el llano de Nilo, hacienda de Tune; esta provincia
estaba conformada por grandes haciendas ganaderas que fueron adjudicadas por el
gobierno Español, a quienes colaboraron en su mal llamada conquista, que por lo
regular eran Ibéricos, quienes reunían mestizos y criollos en calidad de
esclavos, terrazgueros o simples trabajadores, la población aborigen fue
expulsada y sometida por los Españoles. A partir de 1632 el territorio ha
tenido los siguientes nombres:
1632 Valle del Tune
1650 Valle del Guagua
1690 Parroquia de Santa Rosalía de Guagua
1763 Hato de Guagua
1774 Municipio de Guagua
1877 Distrito municipal de Guagua
El 7 de Enero de 1774, el Doctor Ordóñez expresa que el
municipio de Guagua tiene fundación firmada por el ilustrísimo Agustín Manuel y
el excelentísimo Manuel Guirior, lo cual fue oficializado mediante Acuerdo 002
del 14 de Enero de 1973. Hoy Palermo según Decreto 290 de 1906 expedido por
Rafael Puyo Perdomo.
Alcalde elección Popular:
1988 - 1990 Luís Alberto Collazos
1991 - 1992 José Reinel Cerquera Perdomo
1993 - 1995 Juan Antonio Carrera Mejía
1996 - 1997 José Reinel Cerquera Perdomo
1998 - 2000 Miguel Antonio Castañeda
2001 - 2003 José Reinel Cerquera Perdomo, reempleado por
Hernán Vargas Méndez quién gobernó el período de Gobierno
2004 - 2007 Víctor Ernesto Polanía Vanegas
2008 - 2011 Helber Yesid Pinzon Saavedra
2012 - 2015 Orlando Polo Pimentel
la plata
Reseña histórica:
Históricamente el municipio de La Plata formaba parte de la
nación Páez y, a través del tiempo, ha tenido variaciones en su conformación y
definición territorial por situaciones ligadas tanto a la dinámica de sus
gobernantes como por las diferentes acciones del orden político, social,
económico y cultural. Su fundación y conformación como municipio data del 5 de
Junio de 1651 por el Capitán Diego de Ospina y Maldonado, fecha en la cual se
organiza la parroquia de San Sebastián de La Plata. Esta fundación se atribuye
tanto al paso de Sebastián de Belalcazar por las tierras del Cauca en la
búsqueda de “El Dorado” bajo la conexión entre Santafé y Quito, así como el
interés de Los españoles al producirse el hallazgo de minas de plata existentes
en esta área .
A través del tiempo, La Plata ha sido testigo de tres
fundaciones la primera dada por la insurrección a la corona española el 22 de
octubre de 1553; la segunda debida a la extracción y al comercio de la plata a
comienzos de 1554 y la tercera debido a la destrucción por parte de los indios
Paeces, Andaquíes y Yalcones el 17 de junio de 1577.
Economía:
Sector pecuario: del municipio se encuentran localizadas en
dos franjas paralelas a las zonas cálida comprendidas entre los 460 msnm hasta
1.200 msnm y la zona fría de 1.800 a 2.500 msnm con una área total de 56.460
Has. Siendo los principales sistemas productivos la ganadería bovina de doble
propósito, la agricultura, la piscicultura(cálido y frío), porcicultura y otros
de menor importancia económica.
Económico del Sector Agrícola El sector agropecuario es uno
de los renglones más importantes en la economía del Municipio. Esta economía
esta representada principalmente por: arroz, café/plátano, banano,
cacao/plátano, maíz, caña, fríjol, papa; y algunos frutales como lulo, tomate
de árbol y mora,
bandera
escudo
garzon
Reseña Histórica.
Se tiene noticias de la presencia del ser humano desde hace
1000 años, cuando seguramente una tribu nómada habitó esta región y dejó sus
huellas en aquello que se llama “la vajilla de Garzón”, cuyos restos se
conservan en la Universidad Nacional de Colombia, sede de Bogotá, según
investigaciones del antropólogo Héctor Llanos Vargas, profesor de la
Universidad Nacional y consignadas en el libro “Presencia de la cultura de San
Agustín en la depresión cálida del valle del río Magdalena, Garzón Huila” De
tiempos más recientes tenemos referencia desde 1625 en un documento que habla
de la población de “Nuestra Señora de la Limpia Concepción de la Jagua”,
caserío que se convirtió en sitio obligado de posada en el camino de Timaná a
Popayán y a Neiva. El historiador Juan Friede dice que en 1628 en el sitio de
Garzón existe una capilla para el adoctrinamiento de indígenas. El primer
registro escrito aparece en 1633 cuando el Capitán Florencio de Rojas y su
mujer, María de Losada, vendieron parte de esta zona de Garzón por 150
patacones a Francisco Álvaro de Siesa.
De ese año, se habla de la importancia del sector por la
presencia de ganadería y los cultivos de cacao y de plátano. El nombre de
Garzoncito aparece en 1721, porque era una porción de la extensión de Garzón.
El 14 de Octubre de 1782 se concede a la población de Garzoncito, la categoría
de Viceparroquia, dependiente en lo civil de Timaná y en lo eclesiástico de la
Jagua. Esto dio origen a formalizar la fundación de la población, que se
realizó el 17 de Enero de 1783, cuando don Vicente Manrique de Lara, donó los
terrenos necesarios para la construcción del nuevo pueblo. San Miguel Arcángel
es patrono de Garzón desde el 8 de marzo de 1783. El primer alcalde, don
Vicente Sánchez, se posesionó el 1 de Enero de 1788 y el primer párroco, el
presbítero Andrés Alvis, se posesionó el 12 de Septiembre de 1796. La iglesia
catedral se inició el 15 de Noviembre de 1882 en un área de 67 metros de largo
por 13 metros de ancho. Se inauguró en 1887. El 7 de octubre de 1895 se fundó
el Hospital San Vicente de Paúl. El 15 del mismo mes y año, se fundó el
Seminario Conciliar. En Marzo de 1896 se fundó el Colegio de la Presentación.
En 1900 se funda la primera escuela y el 20 de Mayo de ese año se crea la
Diócesis de Garzón. En 1942 se construye la antigua plaza de mercado y se
pavimenta el parque de Bolívar. En 1943 se inaugura la construcción nueva del
Seminario Conciliar. En 1951 se funda el Colegio Nacional Simón Bolívar, que
estrena su sede en 1954.
En 1955 se crea la Emisora Radio Garzón y el Cuerpo de
Bomberos Voluntarios de Garzón. Garzón es el centro vial del Huila, goza de
todos los climas. Está a 888 metros s.n.m., con 24ºC y 90.000 habitantes. Tiene
87 barrios y 97 veredas en 580 kilómetros cuadrados. Un atractivo de Garzón es
su infraestructura urbana con su severo sistema ajedrezado español de cuadras y
manzanas, que parte desde su centro histórico en el Parque Simón Bolívar. La
iglesia Catedral es el símbolo histórico, religioso, cultural y arquitectónico
de la ciudad. Son admirados los centros comerciales Paseo del Rosario, El
Molino y la Galería. Vale la pena conocer los templos de Nazareth y el Rosario,
el Seminario Conciliar, el Monasterio de Pobres Clarisas, el Edificio del Café,
la Torre del Molino y el Palacio Episcopal con su Museo Diocesano. El Santuario
del Cerro de Monserrate. El balneario de La Jagua sobre los ríos Suaza y
Magdalena, las artesanías en fique y en amero de maíz. La Casa de Lomachata, a
1500 metros de altura, goza de una vista general del centro del Huila.
Situación Actual del Municipio. El Municipio de Garzón, ha dado pasos acordes a
los avances y desarrollos de los tiempos actuales. En el sector rural todas las
veredas están interconectadas por vías carreteables. Allí funcionan 10
Instituciones Educativas que tienen 86 sedes escolares. Se ha hecho un esfuerzo
especial para que en cada uno de los sitios escolares haya computadores y se
trabaja para lograr la conectividad. La televisión satelital hace posible que
decenas de canales nacionales e internacionales sean sintonizados en la región
campesina. De igual manera la comunicación celular es efectiva en toda la
jurisdicción. En materia de salud, la E.S.E. Municipal María Auxiliadora, hace
el cubrimiento a toda la zona rural y en los corregimientos existen Puestos de
Salud y Brigadas móviles permanentes. En la mayoría de las veredas hay
Acueductos, que surten de agua potable a la población rural. Podemos asegurar
que hay buenas y amplias comodidades para vivir en el campo.
En la ciudad de Garzón, se vive una dinámica urbana propia
de las poblaciones intermedias. Son 92 barrios, desde las construcciones
antiguas de los sectores tradicionales, hasta las modernas urbanizaciones. En
el paisaje urbano se levantan modernos edificios, que contrastan con el paisaje
de las 7 colinas que rodean el casco urbano: Lomachata, Monserrate, El Chicora,
Loma del Copo, El Boquerón, Alto de Garzón y Occidentales de Comuneros y Julio
Bahamón. Las amplias avenidas, comienzan a abrirse paso, como la Carrera 11, El
Pacífico, Los Olivos, Transversal 21, Circunvalar y el Malecón. Se destaca de
Garzón, la estructura urbanística con el severo estilo ajedrezado español de
calles y carreras que forman manzanas, las cuales se abren a partir del Parque
Simón Bolívar, que es el centro histórico de la ciudad. Es importante el
circuito turístico religioso, por las obras arquitectónicas que encierran. Aquí
destacamos la imponente iglesia Catedral, el palacio de la Curia Episcopal, los
templos parroquiales de San José de Nazareth, de Nuestra Señora del Rosario y
de la Inmaculada Concepción de La Jagua, el Seminario Conciliar, el Monasterio
de Pobres Clarisas, la Capilla de Monserrate y la Casa de Retiros de Lomachata.
Además existen otros sitios para conocer, como la Torre del
Molino, los Edificios del Café, Comfamiliar, Torres del Café, los Centros
Comerciales Paseo del Rosario, El Molino y del Café, con su confortable Hotel
Kahvé. La Plaza de Mercado. El Cementerio. El Parador Terminal de Transporte.
En diversión se tiene el Centro Recreacional Manila, la Hacienda Restaurante La
Floresta, el Restaurante Campestre San Joaquín, La Primavera, El Alemán, la
Casona La Orquídea y tantos otros que ofrecen diversas opciones al visitante.
Una de las virtudes en el desarrollo de la ciudad de Garzón es que goza de
servicios públicos domiciliarios básicos en su totalidad, ya que no se permiten
desarrollos urbanísticos en donde no se puedan prestar esos servicios. Garzón
se proyecta como un atractivo importante para la región centro del Huila, por el
desarrollo del turismo que se prevé en los próximos meses cuando se ponga en
funcionamiento toda la estructura de la Represa Hidroeléctrica El Quimbo, por
su embalse, la construcción del Viaducto y del Puerto de La Jagua. Visión. En
el año 2033, el Municipio de Garzón, será un territorio amable, acogedor,
pacífico, con sana convivencia por su amplia cultura ciudadana, formada por una
sociedad educada, gestora de su bienestar y productiva gracias a la explotación
y aprovechamiento racional de sus recursos agropecuarios, comerciales,
industriales y turísticos, actividades que la consolidan como “Municipio
Región”, eje fundamental del desarrollo de la zona centro del Departamento del
Huila. Será líder como prestador y gestor de servicios de salud, cultura, educación,
infraestructura, comercio, turismo y medio ambiente. El municipio de Garzón,
garantizará el impulso de políticas necesarias para su desarrollo, ofrecerá a
sus ciudadanos, oportunidades permanentes de formación y realización personal
en el marco de la convivencia, solidaridad, equidad, justicia y progreso en
paz.
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escudo
gigante
Historia
Desde 1698 se tiene evidencias de pobladores en la región.
En 1750 existía en la región una Viceparroquia conocida con el nombre de San
Antonio de la Honda, que fue creciendo rápidamente y con ella también lo
hicieron los problemas por la mala ubicación. El 3 de Julio de 1780 fue
nombrado don Jacinto Fajardo como su primer Alcalde y el 13 de septiembre de
1782 el Présbitero Luis Julian Méndez de Molina Cura en propiedad. El 17 de
Septiembre de 1782 se firmó una escritura entre el vendedor Jorge MIguel de
Cuellar y el Alcalde Fernando Méndez de un lote de terrenos para ampliar la
localidad de la parte urbana. Esta fecha se ha consagrado como acta de
fundación del Gigante, pero en realidad el pueblo existía desde antes del año
1698. El 24 de diciembre de 1782 los vecinos decidieron trasladar el pueblo al
lugar que ocupa actualmente, volviéndose a desarrollar, ahora convenientemente,
hasta que en 1789 fue elevado a la categoría de Municipio.
Economía
Gigante es un municipio esencialmente agrícola cuyo 70% de
su economía depende de los cultivos de productos como el café y el cacao.
También destina una gran parte de su territorio a la ganadería. Aunque es
conocida como la capital cacaolera, el café ocupa su primera producción. Otros
productos agrícolas son la granadilla, el maracuyá, el tomate, el plátano y la
yuca.
En cuanto a la ganadería, el municipio cuenta con las
siguientes especies: cebú criollo, cebú suizo y ganado lechero. También abunda
el cerdo y la piscicultura entre los cuales la carpa, el sábalo y el bocachico.
Menos abundante es la avicultura.
Otro sector es el minero entre lo que se destaca el proyecto
de explotación de dos yacimientos petroleros. Uno de ellos está siendo
explotado y ello representa una producción de 700 barriles anuales de petróleo
desde 2000.6 Actualmente es el centro de la obra Represa del Quimbo.
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escudo
baraya
Historia
El territorio de este municipio formó parte de la
jurisdicción de Villavieja con el nombre de La Nutria, probablemente por el
nombre de la quebrada que la baña. Buena parte del área de Baraya, comprendía
los linderos de la hacienda conocida actualmente también como Reyes, así
nombrada posiblemente por haber sido su primitivo dueño el señor presbítero
Mario Tadeo de Reyes, cura de Neiva. Es de anotar que la Hacienda Reyes tenía
la mayor parte de los territorios de los actuales municipios de Villavieja,
Tello y Baraya.
Los primeros habitantes que tomaron posesión de las tierras
de La Nutria, fueron los indios Guarocoes y los Nutrios, dedicados a la
agricultura fundamentalmente. En 1841 ya se mencionaba como la región de Santa
María de la Nutria. Después se empezó a fundar un caserío pajizo, incentivado
principalmente por le comercio de quinas, la que era explotada en la región de
Guayabero y servía para combatir el paludismo especialmente. Esta circunstancia
motivó a muchos comerciantes a desplazarse al lugar fomentando esta actividad y
dándole a Baraya mayor auge en este campo en años posteriores.
En 1856 no tenía capilla ni cementerio y es así que su
importancia no era otra que un paradero de negociantes en quina y ganados. La
feracidad de los terrenos, la salubridad del clima y la fertilidad de la zona,
llamaba la atención de muchos comerciantes y de las personas dedicadas al
pastoreo. Esta circunstancia permitió contar en poco tiempo con gentes
distinguidas para el ejercicio de las actividades públicas y para consolidar
capitales por las riquezas naturales que ofrecía la zona, no solo como aldea
sino como distrito. Esto dio motivo para que fuera erigida como la “Aldea de la
Nutria” por disposición de la ley 5 de diciembre de 1870. La asamblea
legislativa del estado soberano del Tolima, por ley 51 de 1884...”Por gratitud
y con el loable propósito de inmortalizar el nombre del prócer de la independencia,
general Antonio Baraya, solicitan (los vecinos) se cambie el nombre de La
Nutria por el de Baraya” restableció la extinguida Aldea de la Nutria con el
nombre de Baraya, por los mismos límites que le asignó a la aldea de la Nutria
la ley 5 de diciembre de 1870.
Por decreto No. 157 de 28 de septiembre de 1885, el señor
gobernador civil y militar del estado, general don Manuel Casablanca, dispuso:
Restablecer la aldea de Baraya por la misma demarcación que le fijó la última
ley del estado sobre la materia. El territorio de la aldea queda segregado del
distrito de Villavieja desde la fecha de publicación de este decreto.
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